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¿Conocen las típicas máquinas recreativas en las que, para medir la fuerza, hay que golpear un 'punching ball'? ¿Y a cuánta gente conocen que se haya destrozado la mano en una de ellas? Hay bastantes, o al menos yo sé de varios. Pues bien, ahora, en Japón, donde son unos locos de este tipo de máquinas, han tenido que retirar 150 en las que se retaba al jugador a "venciditas" con la máquina porque tres personas se han roto un brazo.

El cacharro en cuestión se llama 'Arm Spirit' y la compañía que lo distribuye, Atlus, asegura que es inofensivo: "La máquina no es tan fuerte, mucho menos que un hombre musculoso. Incluso las mujeres pueden vencerla", según una portavoz de la empresa citada por AP. El brazo mecánico no contraataca, todo un alivio.